lunes, 30 de mayo de 2011

Overdose.


Estoy intentando dejarme llevar. Hago de mis días una aventura y de mis noches miles de ellas. La euforia cala hasta el fondo de mi ser y me posee; invade poro a poro y me obliga a perder el poco norte que me quedaba. Incoherente. Apenas consciente de lo que debo hacer prefiero simplemente hacerlo. Mis labios improvisan ideas con el humo de la pasión contenida. No hay luz, sino reflejos. No hay personas, sino siluetas moviéndose de manera intermitente. Él, ella, vosotros. Tú. El carmín humeante de mi boca. El éxtasis de mis sentidos. El alcohol se derrama por mi cuerpo al son de la música, estruendosa, demente. Como yo esta noche. Como yo por ti.

miércoles, 25 de mayo de 2011

Never too far. Never too late.

Lo que la verdad esconde. Lo que me sedujo de ella. Lo que cautivó mis sentidos.
El azul en las sombras. La magia negra. Las noches de aullidos.
Lo paradójico, la poesía. El arte y tú.
Los versos al aire. Los besos de nadie. Lo poco común.
La ambigüedad, el silencio, las palabras valientes.
La flaqueza, la entereza, la mirada de la gente.
El caos en que desemboca toda acción. 
La huída. La caída. La rebelión.
This pic it's not mine, but I feel it inside.

martes, 10 de mayo de 2011

Release.

El impulso que le impidió acudir a la cita en la fecha fijada desde hacía tantos meses fue el mismo que le empujó a coger ese mismo día aquel tren con destino impreciso con incoherente decisión, apearse en la parada que más sugerente le pareció, y correr. Correr como si el fin del mundo estuviera a la vuelta de la esquina de la siguiente calle. Correr sin pensar en nada más que en la consecución de sus pies, que ya no corrían: volaban. Correr ante la mirada estupefacta e incrédula del mundo, y aterrizar en el suelo estallando en una sonora carcajada. Porque todo daba igual. Porque lo que menos importaba era hacia dónde o hasta cuándo. Porque no necesitaba nada ni a nadie, estaba siendo feliz. 
Era feliz, y se dio cuenta a tiempo.

domingo, 8 de mayo de 2011

Whispers.

Y ella se escapó. Como se escapan los atardeceres con el sol, como comienzan los días con las estrellas... Y cuando te quieres dar cuenta, hoy ya no existe.
Y fue entonces cuando el pasado quedó demasiado lejos, cuando la realidad se limitó a los recuerdos. Cuando el camino se hizo demasiado largo para cargar con la culpa a cuestas. Cuando el frío arrasó todo lo que quedaba y en la nada tampoco estaba yo.
Con la sutileza que la caracteriza se fue, y tú... ni te diste cuenta.

Igual que a ti, igual que a mí, la realidad los aplastaba.